Geomorfología

Desde la presa de Linares del Arroyo, en el Término Municipal de Maderuelo, hasta las proximidades de Valdevacas y Montejo de la Vega de la Serrezuela, el río Riaza ha excavado un valle de vertientes verticales con escarpes labrados sobre calizas turonenses, cuya profundidad oscila en torno a 150 m. y cuya anchura máxima no supera los 200 ó 300 metros.

El origen de esta garganta es por incisión lineal que cortando la masa turonense alcanzó al Cenomanense margoso donde labró su lecho, matizado por unos procesos kársticos secundarios y donde además sus vertientes han experimentado una notable evolución, como consecuencia de los procesos que han permitido el retroceso de los escarpes, merced a la red ortogonal de diaclasas y la estratigrafía turonense. A la hendidura del Riaza hay que unir las acciones de otros arroyos afluentes (Casuar, Valugar, Vallejo-Sancho) que han contribuido junto con el primero a la disección del anticlinal.